Sancho III de Castilla (1157-1158)


Sancho III de Castilla
Compendio de crónicas de reyes (Biblioteca Nacional)
    En 1157 accede al trono castellano tras la muerte de su padre, Alfonso VII, que había dividido el reino entre sus dos hijos, Fernando II recibió el reino de León y Sancho III “el Deseado”, recibió la corona de Castilla.

    Consiguió mantener el vasallaje de Ramón Berenguer IV rey de Aragón y Cataluña, hacia su persona, al igual que antes había sido vasallo de su padre Alfonso VII, devolviéndole Zaragoza y otras plazas, en 1158.


    Con su hermano Fernando II, firmó el llamado pacto de Sahagún en 1158, que consolidaba la división de los reinos de Castilla y León, a la vez que se comprometían a no emprender ningún tipo de agresión entre ellos.

    Morirá tempranamente, en 1158, dejando como heredero de su reino a Alfonso VIII, aún menor de edad, lo que provocará diversas pugnas por el poder, sobre todo entre las principales familias nobiliarias, como las de los Castro y los Lara.